PANAMÁ.
Es un país admirable. Y no sólo lo es por su estratégica situación geográfica y su papel preponderante en Centroamérica desde el Descubrimiento de Colón, sino por la forma en cómo ha sabido sobreponerse, a lo largo de su historia, a las trampas que los sucesivos “Libertadores“ le fueron tendiendo. Hoy es un país vertiginosamente próspero; un país seguro y pacífico, tanto que hasta las distintas etnias indígenas, soberanas en sus autonomías, hacen de su capa un sayo; lo que nos permite a los que llegamos allí poder vivir el sueño infantil de convertirnos en un Robinson Crusoe.
ARCHIPIÉLAGO SAN BLAS DE LOS INDIOS KUNA
Panamá tiene más de 1000 islas en el Caribe...
... De ellas, 400 están en el Archipiélago San Blas, la mayoria deshabitadas
Isla del Hotel Sapibenega
La isla Iskardup pertenece al Hotel Sapibenega...,,
... atendido por indígenas kuna, etnia que impone sus modos, usos y costumbres en el archipiélago.
Las cabañas del hotel están construídas sobre pilotes afincados sobre rocas en el borde de la isla.
Es una isla pequeña en donde todo está a mano.
Incluso la pesca se lleva a cabo delante de la habitación....
adonde llega con su barca el staff al completo: ¡Langostas para la cena!
Isla Pelícano
Es la isla vecina, a dos golpes de remo.
Tiene una especie de hierba marina tupida y muy mullida.
Pero más vale mirar hacia arriba y vigilar los cocoteros, también conocidos como "palmeras asesinas": Por muy dura que tengas la cabeza, el coco maduro, el que cae por su propio peso, te la puede partir al primer intento.
Mejor se está en el agua, que es cálida.
Aunque hay quien no termina de decidirse.
También está cerca el "Islote mochilero"; los indios kuna no se han olvidado de ellos.
Playón Chico
Es la isla donde se encuentra la población de esta zona del archipiélago.
Las construcciones son a base de cañas y ramas. Por eso en el incendio que hubo el día que llegamos ...
..., nos cuentan que desaparecieron 42 casas. Desde nuestra isla las habíamos visto arder como teas encendidas
Todo ocurrió tan deprisa que no pudieron salvar ni la ropa. Y los niños andan desnudos
Pero, ajenos a la desgracia, siguen con su juego favorito...
...Éste prefiere aprender a bailar la peonza
Keti en Playón Chico como en casa...
...viendo cómo reparan el "tejado" con ramas verdes
o admirando qué bien viven los kunas bajo el matriarcado. Aquí Jenny posa orgullosa con con su hijo y su nieto
De vuelta a la calma de la isla del Sapibenega...
con su playa chiquitita atendidos por la eficiente Anna que luce la emblemática mola, el corpiño bordado y trabajado con una técnica laboriosa a base de superposiciones de telas de colores
Isla Pozo
Como una bendición
Solitaria...
De arena finísima, pero que ni vuela ni quema...
El agua cálida...
Limpia
Una isla idílica hasta para los más exigentes
Anochece con nubes
Alexi toca a desayuno
"No toques tan temprano Sam"
Teo anima con sus descubrimientos."Haga pronto la foto, sólo puede estar cinco minutos fuera del agua"
Isla Iguana
Su nombre se debe a que estaba poblada de iguanas.
Ahora no queda ninguna, se las comieron todas
Sólo hay un guarda y su perro. Están allí para evitar el robo de cocos; los kunas practican el trueque y cambian cocos por otros productos con sus vecinos de Colombia.
A la sombra de una palmera "descocada"
Alexi cuelga unas hamacas para echar una siesta
La hamaca es algo fundamental en la vida de los kunas; está relacionada con el status
En las bodas son parte fundamental del rito: entre varios hombres toman a la novia y la depositan sobre el novio que permanece tumbado en una hamaca, y de ese modo queda formalizado el enlace.
Un islote de manglares
Aún es de noche, pero es el momento de abandonar la isla
Gracias Alexi, Ana, Tom, Teo, Geraldina... Para siempre en la memoria más dulce... ¡Qué bien te sienta la mola, Anna!
Un vuelo corto y... Ciudad de Panamá.
De las aguas del Caribe de Kuna Yala...
... a las del Pacífico de la Ciudad de Panamá
Y de los postes de la luz que retoñan...
.... a rascacielos como El Tornillo y al paraíso financiero, la banca mundial y el Canal de Panamá
Atrás queda la cabaña del Sapibenega, con las olas haciendo splash contra los pilotes a modo de canción de cuna, y su "aire incondicional", el del viento que se cuela por entre las cañas de las paredes
Aunque la habitación del Bristol de Ciudad de Panamá era muy confortable, ambos se semejaban en el desayuno que no te complicaba con elecciones: un sólo tipo de zumo, un sólo tipo de yogur
Las kuna yala con sus molas, las panameñas con las polleras
El Canal del Atlántico al Pacífico
La misma compañia francesa que construyera el de Suez, comenzó éste en 1881. Pero los más de 20000 obreros que trajeron de las islas se murieron de fiebre amarilla y de malaria y la compañía quebró.
EEUU apoyó que Panamá se independizara de Colombia y se hizo con el contrato para terminar el canal (1906). Los franceses recuperaron su dinero y los estadounidenses incluyeron una cláusula por la que, además de explotar el canal a perpetuidad, se hacían con la soberanía de la zona (16 kilómetros a lo ancho del canal que tiene 80 kilómetros de largo) y se permitía la libre intervención armada de EEUU cuando este país estimase oportuno.
Hartos del intervencionismo de los gringos (no sólo decretaron el bloqueo económico del país en 1988 sino que, bajo el pretencioso nombre de "Causa Justa", invadieron Panamá y bombardearon su capital), los panameños consiguieron recuperar la soberanía del canal a finales de1999.
La ampliación del canal, con nuevas vías y más esclusas, encargada a una empresa española, está a punto de terminar. Podrán pasar buques de mayor tonelaje con doble de carga de la permitida actualmente.
COLÓN
Se puede ir del Pacífico al Atlántico, de Ciudad de Panamá a Colón, en una hora y comprar productos auténticos de las mejores marcas en la Zona Libre, la segunda más importante del mundo.
Portobelo
Próximo a Colón está el pueblo de Portobelo, principal puerto del antiguo Imperio español en América.
Allí está el Fuerte de San Jerónimo que, como otros de la zona, se levantó para proteger las mercancías que
entraban y salían del puerto del ataque de barcos piratas que actuaban con la connivencia de Inglaterra
Morgan y sus filibusteros, ante la resistencia de los españoles del fuerte,
mandó traer a monjas, curas y ancianos del pueblo y los situó al pie de la muralla para forzar con ello la rendición del fuerte. Los españples no se riendieron, pero el pirata consiguió tomar la ciudad y saquearla.
CIUDAD DE PANAMÁ. Casco Viejo
De nuevo en el Pacífico, se encuentran las huellas de Morgan: de Panamá la vieja no queda piedra sobre piedra (1671) Pero a pesar de las atrocidades que cometió, fue nombrado caballero por el rey Carlos II de Inglaterra.
Así que de la primera ciudad fundada por los españoles en el Pacífico, Panamá, no queda a penas nada porque lo que se conoce como Casco Viejo, no es tan viejo...
... Aunque algo se salvó del incendiario Morgan: este altar barrococo de la Iglesia de San José, de caoba recubierta de oro, se salvó del incendio gracias a un fraile que lo cubrió con capas de pintura como si no tuviera ningún valor.
En un amplia plaza, delante de una iglesia, se levanta un gran monumento a Simón Bolívar, quien se levantara contra España para formar La Gran Colombia (1821); una república que englobaba Panamá, Colombia, Venezuela, Ecuador y territorios de Nicaragua y Brasil. Panamá no conseguiría independizarse de Colombia hasta 1903.
En esta recoleta plaza se encuentra este pequeño busto del emperador Carlos I de España (V de Alemania)
Por lo demás, esta ciudad es muy agradable para pasear...
Edificios de aspecto colonial de influencias francesa e italiana con múltiples comercios de artesanía, restaurantes y cafés y la zona gubernamental donde destaca la casa de la presidencia, conocida como Palacio de las Garzas...
En 1673 la corona española mandó dinero para reconstruír la ciudad, que había sido incendiada por Morgan, y un "listo" de entonces usó parte del dinero para construír su casa, ésta que ahora es sede de la Presidencia .
Las iglesias se están restaurando
Pero de algunas sólo queda la fachada
Un ejemplo de barco con bandera panameña, el de Al Capone.
Volver a las islas será un inmenso placer